Toda mi familia alrededor de La 2. A las once y media emiten (tres meses después) un concierto especial para niños, dedicado a Don Quijote. Lo que nos ha obligado a congregarnos en torno a tan siniestro aparato, todos a la misma hora, no es otra cosa que la esperanza banal de vislumbrar fugazmente a nuestra hija mayor que fue en calidad de público a tan sonado acontecimiento.
A la mitad de la emisión, se corta bruscamente la imagen para dar paso en directo a la ceremonia de entrega del Premio Cervantes 2004. Ni más ni menos que el rey y la reina, el presidente más presidente de todos, la Calvo y la Espe. ¡Qué compromiso con la litercultura! ¿Y no habría merecido la entrega -ya en pantalla por más de media hora, mi hija desquiciada, mi mujer refunfuñante, y yo obsesivamente pendiente de don Rafael- espacio fijo de programación en la rejilla televisiva?
Después de 15 minutos de prolegómenos futiles, llega el discurso de Sánchez Ferlosio: "Caracter y destino". Inicia con un emotivo recuerdo con su hija de tres años, en el año 59, paseando por el Retiro, y de cómo su hija le hace reflexionar sobre el argumento en la literatura. Su complejidad, su dicción poco televisiva, los insoportables cortes de sonido me han hecho desistir (ya lo leeré por escrito) y aprovechar para configurar este postito, que actualizaré tan pronto descubra el discurso transcrito y accesible en Internet
Actualización 25 abril-
Discurso íntegro en ABC.
- También en abladías,
Sánchez Ferlosio, Cervantes 2004.
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