Cambia, papá

Han sido cuatro años intensos de mi vida intentando hacer realidad una idea o ideas que raras veces han sido mías. Desde que dejé IBM, para apostar por la idea peregrina de un amigo mío, DiceLaRed, hasta que ahora salgo del día a día de LastInfoo, ha llovido tanto, que mucha parte del trayecto me parece confundida con el mito creado en mi memoria. LastInfoo es ya una empresa consolidada, líder en estas lides, y sin duda, una referencia indiscutible en el panorama de la comunicación corporativa online, tanto en España como en el extranjero, y de alguna forma, ahora me he visto necesitado de un cambio. Así que abandono el puesto de Director de Marketing y Ventas de LastInfoo, para seguir siendo socio, "co-fundador", amante y evangelista de la empresa.

Durante el fin de semana he aprovechado el fausto evento, para comentarlo en petit comité con algunos amigos de la escena blog (tras semejante despliegue, no encuentro metáfora mejor), y ahora no quería dejar pasar la ocasión de aprovechar este espacio mío para ese tipo de cosas que mejor sirve un blog personal: tener al corriente de la vida de cada uno a conocidos y allegados.

Respecto a abladías, ya he decidido seguir (y cumplir en breve los dos años) y sólo espero que mi vida no se complique tanto como para impedirme cumplir mi palabra. Estoy casi seguro de que más bien seré yo el que le complique la vida a mis nuevos compañeros, con mis concepciones dospuntocero de Internet.

Me voy a otro mundo. Si alguien tiene interés en conocer mi nuevo destino, no tiene más que pinchar el banner (y comprobar lo mucho que hay por hacer).

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